Querer tal cual es

Amarlo es que no me importe cuántas horas, o días pasemos juntos, siempre termino extrañándolo
Amarlo, también, es que se tire pedos con ruidos, y que no me importe.

Yo te prometo te escribiré si es que paras de correr

Me acuerdo cuando escribía... Sí, sí, aunque algunos no recuerden, yo escribía estas notas. La gente quiere leerte en crisis. No quieren saber nada de lo bien que te va ahora, de lo feliz que sos, de lo mucho que lo amás o de cómo ahora son felices juntos. Y mirá que hay un montón de cosas hermosas para decir, eh. Pero ellos quieren angustia, dolor, confusión. Tu peor costado, lo peor de vos, que en el fondo, se convertía en los mejores textos del planeta. Bueno, tanto no... pero era tu mejor parte escrita. Quieren ver la catarsis enfermiza, porque de ahí salían las mejores oraciones. La verdad, un poco, extraño inspirarme así. Extraño escuchar la letra de alguna canción triste y sentirme identificada. No es que prefiera lo peor de mí, sólo digo que estar acostumbrada a algo dificulta que quieras abandonarlo para siempre.

Una de esas frases

De cada mil personas que pasen por esa puerta -decía- acaso nos conmueva solamente una. Del mismo modo, quizás solo una entre las mil tenga a bien impresionarse con nosotros. La cuenta es sencilla: sin contar percepciones engañosas y desilusiones posteriores, la posibilidad de un amor correspondido es de una en un millón. No esta tan mal, después de todo. 

Alejandro Dolina

Una de mis frases preferidas de este señor.

Enero

A los que adoran el verano, les pregunto... ¿qué  tiene de copado chivar como un hijo de puta todo el día, pegotearte todo el tiempo con la gente en el bondi, cagarte de calor y que te corran gotas de sudor por el cuerpo, que los olores sean más fuertes, que a la noche no puedas dormir porque sentís que te está dando fiebre, y que por la mañana maldigas la noche de mierda que pasaste, que el local donde tenías que ir a comprar esté cerrado por vacaciones, que los mosquitos aparezcan de nuevo y te empiecen a romper las pelotas, que las cucarachas empiecen a invadir tu casa (de nuevo), que entres a un lugar con aire acondicionado y al salir quieras morir, que no puedas dormir abrazando a tu novio, que no puedas abrazar a tu perro más de 3 segundos y medio, que el aire que da el ventilador no te alcance y que te corten la luz cada dos por tres por el barrio? Cuentenme que todavía no entendí.